Verso Cálido.

En la noche lunática,
bajo el cielo tórrido
se esconde una mujer cálida.
Un grito atávico resuena,
un escándalo en el viento
y el pérfido silencio
es roto por un susurro efímero.

Con su cuerpo de espíritu tímido
se despierta una mirada mágica.
Se acerca con pasos sigilosos
en la noche eterna
con una luna nueva,
casi sin estrellas.

Ella se estira apática ,
abriendo su piel húmeda ,
Pero en su centro sórdida,
late un corazón lúdico, 

rítmico.
La pasión es elástica,
una llama que arde,
Una lengua bífida
que lame en la noche pálida.

El deseo cíclico,
se desvanece entre sus senos;
Entre las piernas,
el fruto, que rítmico,
libera cúrcuma.

Un escándalo efímero
de un caudal pálido,
único... místico
de un orgasmo sórdido
en un portal cáustico,

de un verso cálido...

Rodrigo Fúster

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