destellos oscuros colorean el universo de infinitos silencios.
Los innúmeros horizontes aparentan sombras,
pronto el cielo se abre entre pestañas,
una delgada luna se exhibe,
un lienzo húmedo entre las sabanas.
Su luz, en pinceladas;
Su delicada sonrisa incasta,
seduce el lienzo donde se esconde.
Donde cautiva y quema.
El trasluz, sencilla tu rostro,
una mirada penetrante funde…
Los colores perdidos renacen en latidos
aumentando mis ganas.
De pensar en ti, disfruto,
de sentirte, emerjo.
En el perfil del horizonte
el cielo deja caer tu tibio atardecer.
Mis labios arden
en la húmedad de tu piel,
y te dejas beber
derramando tus licores.
Los colores del pequeño crepúsculo,
evocan en mí las emociones,
vibra entre tus piernas
mezclandose en tu luz.
Es tu esencia, mis instintos,
la inmensidad de sentir derramandote.
La luz y los colores de luna
el portal de mis sueños.
Y ahí me esperas,
regazo y piel,
cuerpos desnudos y abrazados,
tu de espaldas y yo entrando.
Mi cuerpo al tuyo,
piernas entrelazadas,
sentir de vibraciones,
salsa de latidos.
Caudales desbordados,
carnes fundidas.
Gustab
Larry Niden
Amo tu poesía, sin duda alguna, Gustab.
ResponderEliminarUn beso enorme.
Camino sin igual, de conocer y de auto cocimiento, en que nos entregamos sin usar nuestra razón, tan solo dejándonos llevar por el deseo, la intuición y la emoción. Es todo un significativo sendero para aprender a confiar, para soltar el control, y para llegar a ese punto culmine en que explota un caudal que arrastra muchas de nuestras sombras y permite que poco a poco, entre una nueva luz. Es mejor elegir bien con quien compartimos esta energía maravilla para no empañar sus efectos expansivos en nuestro cuerpo y alma.
ResponderEliminarEs toda una aventura leerte Gustab, sin duda, una interesante experiencia. Un abrazo, Paty