ERASE UNA VEZ... que era una cenicienta con forma de pera, Dulce como la miel que quiera como no cualquiera. Sensual como la flor de higuera, de ojos negros de morera. Mora mora, ojos de primavera con mil orgasmos en la sesera. Negra como la noche corazón de hoguera. De miel derroche, de humedad la madriguera. Quien no se enredase en su enredadera no creería que es hechicera. si mi sexo introdujera de astillas convertiría a madera.. Y ahí quedó la brasilera, que mi corazón enciende, mis ganas incinera y la vida me desprende. Erase una vez que era que de una brasilera me enamoré y aunque mis ganas se fueron con la primavera, con la negra me quedé. Gustab "Al deseo, acompañado de la idea de satisfacerse, se le denomina esperanza; despojado de tal idea, desesperación." Thomas Hobbes relatos aquí
La deseo. Su cuerpo pestíla sexo. La noche se hizo larga, follamos hasta el amanecer. El encierro no ayuda a dejar de pensarnos y desearnos. Su olor esta en mi nariz, mi boca, es el recipiente que espera su ambrosía. Sabe a sexo, a fuego, a cenizas... Nuestros jugos están revueltos, con el sabor del otro. Ahora el agua borra todo, lo que dejé dentro de ella, la ducha, no deja lavarlo. Sus manos siguen temblando, Mis rodillas, me obligan a caer, mirándome a través del vaho del espejo. Gustab. "Es una ley inexorable en la vida de los sexos, la acción anafrodisíaca de la costumbre." Gregorio Marañón
El abrazo; la previa al deseo, El beso, a la gula, la caricia a la lujuria, el sexo, un espacio lleno de ti. Sugerente, casi adictivo... Un beso de nieve que se disuelve entre los labios Quemando nuestras almas. Le pido al viento... La oportunidad que prenda las cenizas... Le pido a las estrellas, Qué iluminen la oscuridad Le pido a los espectros... Qué tus manos me sostengan. Mientras bulle la tormenta recogida por tu boca Y que esas gotas Diluyan tu garganta quemando la lluvia en tu vientre. Gustab
Letras esparcidas por su piel, perdidas en el cóncavo ombligo, en la cavidad de su entrepierna. Abismos sin besos, senos que no olvido mujeres para gozar. Gustab
“Porque ha pasado el invierno, se ha mudado, la lluvia se fue, el tiempo de la canción ha venido, y en nuestro país se ha oído la voz de la tórtola”, Salomón en el libro de Cantares ¿Dónde vas tortolillo tan elegante?, De frac vistes el viento y de tan fino talante, que engalanas el firmamento. -A cenar con la tortolilla errante,- dijo el tórtolo... -monógamo he de ser, si lentejas quiero comer y tener plumaje brillante... Pardo plumaje de nuca y corona, si tortolos se les dice a los enamorados... tu eres el mejor de los amantes, por eso brilla tu plumaje cuando hay sexo abundante. La lenteja rutilante brilla en la oscuridad y de rojo rubí palpitante, libo su obscenidad. De tórtola y vulva saben los amantes. De lentejas palpitantes sólo el ave excitante. ¿Qué hay de cenar?- preguntó la tórtola Libada de lentejas - dijo el amante. Pues aquí te espero.- dijo la tórtola Pues, por aquí te doy.- dijo el amante.- Gustab. De lentejas y Tórtolas... Muerde Aqu...
Huelo el perfume que se esconde entre los encajes, el halo inalcanzable de humedad, la fragancia impregnada del deseo que entre los hilos escondes. Te sueño embriagado pegado al zumo que desprende el dia a los jugos que como vertientes soltaran la noche. En el caudal de los recónditos y sensuales escondites, en el río que inundara la noche. Te sueño enredada entre las sabanas, Te sueño, te sueño orgásmica. Gustab “ Según con la imaginación, iba alejándose de sus sentimientos íntimos, atraída por la realidad de la vida, en su pensamiento, se perdía la limpieza de las ideas y la serenidad de los juicios. ” ― Jacinto Octavio Picón
Danza a tiempo lento la Habana, muy preciso y formado; Con corcheas y con puntillo, caderas negras de brillante color. Exuda tu cuello de diamante negro lagrimas de sudor, torrentes negros empaparon mi boca de sal dulce, catalizador de sabor. Habanera entre sus montes oscuros, de casquillos negros serpenteé, rezumí tu rubia miel alimentando tu deseo. Abriendo tus hojas de tabaco negro, entré en tu humedal rojo rubí. Apasionado tinte escondía tu piel de cabecilla trémula excitada. Suda néctar moreno entre mis labios, sal, de tu mojada piel. Orgasmo infinito entre mis dedos, gemido y jadeo, zumo de miel. Así fue mi amor en la Habana; de revueltas sábanas... senos, muslos y nalgas negras, labios gruesos de silbante sabor. Allá en la miseria, sólo amor. Habanera, aquí el amor transita sabroso y subversivo, el sol identifica relajo y candor ... palabreaba Benedetti. Gustab. "Me desordeno, amor, me desordeno cuando voy en tu boca, demorada, y casi sin por qué, casi por n...
Trazo grueso y curvo, pincel de esquizofrénico poesía. Cuervos en tu noche belleza oscura sobre el trigal. Girasoles sueltos y cortados vendajes de valentía por amor, oreja cortada por tu mano ofrenda de amor. Sillas deformadas por tus ojos viejo catre que tantas pesadillas acuno. Oscuras y brillante estrella sobre cielo azul, blancos rayos de luz. Ocres y azules cubren tus telas de grueso trazo y frágil pincel. Lloran las farolas sobre adoquines desfigurados por tu mente enferma de amor. Viviste de la caridad de un hermano, del amor no correspondido, de la pintura que nunca se aprecio, recitar del museo cerrado. Hoy tus pinturas son una leyenda cuesta oro tu atrevimiento. Sabio loco esquizofrénico cuantos te perdieron. Poesía, recita su belleza, su valentía loca, uno entre mil, noche estrellada, blancos reflejos de luz, Su atrevimiento, fueron girasoles secos. Gustab " A medida que avanzamos en la vida, se vuelve mas y mas difícil, pero en la lucha contra las dificultades , se d...
Ella me murmura: provócame placer jugando desnuda, ardiente y deseada. Encendida dichosa vive, siente mi lengua bebiendo su vertiente. Hilos húmedos de seda cuelgan de la gruta que mi lengua suda. Lengua impetuosa, que se desliza satisfecha por su cuerpo desvelado; El agua centella sobre su piel tostada; A mi, el río me baña de nectar y placer. Sabe a mangos a mangos del jardín, al rocío de los amaneceres, mientras mis manos, palpan la oscuridad. Un caracol de dedos se arrastra babeando un beso... Tan lento, que se vuelve labio, y el labio, despacio beso. Oblicuo recorrido, sólo pido que me cuentes el camino y que vuelva o muera en el intento. Soy en su vientre sinuoso reptil, colgante de tulipanes abrazados, comisura en la rendija de nácar que nada deja escapar, vaivén de luz. Con ópalos blancos detrás del chocante vello, moja mi boca que sale de la carne abierta, ruta de seda memorizada en sal. Anhelo el pálpito en su saliente, el infierno pierna ade...
“...su abdomen está tallada de marfil, sus finas caderas , su vientre desnudo, el encanto de su jardín y el florecimiento de su huerta...” ; "Cantar de los cantares". Salomón. Pensando en lo que traerían los Magos, reyes de la perdición... Tus labios, como hilos de Seda, y tu habla de seducción. Tus mejillas, como néctares de granada detrás de tu velo, transparencia de seno jugoso. Y Sus nalgas, como la primavera, eran de especias aromáticas, como fragantes flores; Sus labios, como lirios que destilan mirra fragante. En el erotismo de tus vacíos no hay lugar para la belleza real. Hay ciertos abismos de aspecto jugoso, aspecto hermoso, hay forma, hay volcanes erupcionando sin quemar. Tu lava cremosa de suave transparencia, enfatizan el torpe erecto de tus pezones. Y con prisa adolescente, un esfuerzo por resaltar; la piel convertida en suave ceniza, quemando el pudor en suave d...
Esos pechos que nadan en la sed y se beben a borbotones de poesía.
ResponderEliminarPrecioso y excitante lo que has escrito.
Un abrazo.
Una invitación sensual y provocadora, sin duda.
ResponderEliminarUn placer leerte
Saludos